Graciosamente, ayer estaba un poco ansioso con el tema del cumpleaños ya que varias personas se habían comunicado conmigo preguntándome al respecto «¿Cuántos son mañana?» y así. Si me conoces sabes (y si no te enterarás) que el tema realmente no es algo que me emocione mucho y todo empezó en mis primeros años de vida, cuenta mi madre (con algo de pena) que solía terminar mis fiestas de cumpleaños de una forma poco agradable mucho antes de lo previsto.

Sin embargo, este 11 de octubre de 2012 ha resultado un tanto digamos, diferente, había tenido unos días de malas noticias pero desde muy temprano hoy familiares y amigos desde diferentes latitudes y longitudes se han encargado de saludarme y hacerme llegar sus deseos y el ánimo cambió.

Gracias infinitas a tod@s los que se acordaron y se tomaron unos minutos para expresar sus buenos deseos.